Era el primer día de clases de Celeste, la pequeña hija de
Carla, la niña entraba a la primaria y estaba muy contenta.
-Adiós mamá- Dijo Celeste con una linda sonrisa
-Adiós mi vida cuídate, que te valla bien
Cuando Celeste iba entrando al salón que su nueva maestra le
había indicado vio a una niña llorando, nadie le hacía caso, estaba sola.
-¿Por qué lloras?- Preguntó Celeste
-¡Extraño a mi mamá!- Dijo la niña entre lágrimas
-¿Por qué, dónde está?
-No sé, hace un mes que no la veo
-Ah pero ¿Quieres ser mi amiga?- Dijo Celeste con una enorme
sonrisa para animar a su compañera
-¡Sí!- Respondió la pequeña muy contenta y se limpió las
lágrimas
-¿Y cómo te llamas?- Celeste necesitaba el nombre de su
nueva amiga
-Sofía, bueno Sofi- Dijo la pequeña ya más contenta
-¿Ya estás mejor?
-Sí, ¿Qué te parece si hoy vamos a mi casa a jugar? Así nos
conocemos mejor y no me siento sola
-Muy lindo pero no sé si mi mami me deje
-Pues le preguntamos a la salida y que mi papá nos lleve
-Muy bien
Así pasaron el día juntas, Celeste y Sofía se estaban
divirtiendo mucho.
-Muy bien niños cada vez que salgamos van a esperar en el
salón a que sus papás vengan por ustedes- Indicaba la maestra
-Sí maestra
-Vengo por Celeste
-Yo vine por Sofía González
-¡Papá!- Gritó la pequeña y salió corriendo
-Hola mami- Dijo Celeste para saludar a Carla
-Hola hermosa ¿Qué tal tu primer día de clases?- Roger
estaba feliz de ver a su hija tan contenta
-Bien, mira ella es mi amiga Celeste
-Hola- La niña sonrió- Y ella es mi mamá Carla
-Que linda mamá tienes- Dijo Sofía
-Hola, un gusto Carla medina
-Igualmente, Rogelio González- Estrecharon las manos sin
prestar mucha atención
-Mamá Sofi me invitó a su casa a jugar, hoy
-Mi vida es tu primer día y seguro tienes tarea, además
tengo que volver al trabajo
-¿Y me voy a quedar sola?- Replicó Celeste
-No, te quedarás con tu abuelita, yo vuelvo rápido
-No se preocupe me las llevo a la casa y yo las cuido, no
tengo problema- Ofreció Roger muy amable
-No, gracias pero no puedo y háblame de tú- Una leve sonrisa
apareció en el rostro de Carla
-Bien Carla, como tú quieras
-Pero mamá
-Papá dile a la señora Carla que deje ir con nosotros a
Celeste- Las pequeñas fruncían el ceño y hacían cara de enojadas
-A ver Sofía, Carla sabe lo que tiene que hacer y porque no
deja ir a tu amiga con nosotros, tranquila
-Mira Celeste, te prometo que el viernes te llevo a casa de
Sofi para que estén juntas
-Está bien- Aceptó Celeste aún con su carita de enojo
-Podemos salir todos el viernes, claro si no tienes problema
o trabajo
-Ah me parece lindo, nos vemos el viernes.
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